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| Casaa natal de Hervert Von Karajan en Salzburgo |
El pasado día 22 se conmemoró el día de la música surgido del patronato de Santa Cecilia, declarada por la Iglesia Católica patrona de los músicos. Al amparo de esta celebración tuvieron lugar innumerables conciertos en todo el mundo. Yo tampoco permanecí indiferente a este evento puesto que acudí a un modesto concierto de música de zarzuela a cargo de la Banda de Música de Tudela y el coro Joaquín Gaztambide.
Estos festejos me trajeron a la memoria el viaje realizado a Austria el pasado mes de mayo. Recordé con agrado el ambiente de Salzburgo, ciudad de la música por antonomasia, donde tuvimos la suerte de asistir a un concierto de cámara. Unas horas antes, a pesar de la lluvia, en una de sus calles un grupo interpretaba música de Mozart ante la mirada atenta de los transeúntes. Por la tarde, varios conjuntos musicales amenizaban el fin de semana de los austriacos y de los visitantes entre los que nos encontrábamos nosotros.
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| Música de Mozart en la calle |
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| Grupo musical amenizando la tarde |
Paseando por sus calles, admiramos la casa de Mozart en la Getreidegasse y, en las orillas del río Salzach, junto al puente de Makart, la casa natal de Herbert Von Karajan, cuya estatua de bronce preside el jardín.
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| Teatro de la Opera de Viena |
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| Escalinata del Teatro de la Opera de Viena |
Evoqué nuestra visita al impresionante Teatro de la Opera de Viena con su magnífica escalinata y la terraza que se asoma a la Ringstrasse. Da la impresión de que por sus galerías y salones deambulan los espíritus imperiales de Sissi y Francisco José.
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| Casa de Beethoven en Baden |
Pero sobre todo rememoré nuestro recorrido por el valle de Sta. Helena de regreso de Mayerling, pasando por la ciudad balnearia de Baden, donde contemplamos la casa de Beethoven, mientras en el autobús sonaban los compases de los "Cuentos de los bosques de Viena" de Johann Strauss. El escuchar ese vals en ese lugar, precisamente en los bosques de Viena, es algo que nunca olvidaré.
¡Fantástico, Felipe! O de cómo la música nos transporta: de la celebración de Santa Cecilia y en concierto de Tudela a la ciudad de Salzburgo, y todo ello con el acompañamiento musical y habitual de tu página. Una buena celebración y un deleite seguirte y tenerte por amigo.
ResponderEliminarHe seguido con placer y deleite tus andanzas por sitios que también he recorrido. Gracias por traerlos de vuelta a mi memoria. La música es una de las más hermosas aportaciones del hombre a sus congéneres.
ResponderEliminarUn abrazo
Felipeeee!!!! Pero qué afortunado eres por haber disfrutado de Viena!!!! La música, el entorno, los grandes genios de los pentagramas... uffff!!! y zarzuela!!!Encima zarzuela con lo bonito que es éste género!!!! Buena entrada amigo!!!! Besosssssss cacereñosssssss!!!!
ResponderEliminarDentro de bien poco podremos escuchar el famoso concierto de año nuevo, por la tele, claro, que en persona y directo es cosa de privilegiados. Un saludo.
ResponderEliminarEl concierto de año nuevo no se celebra en el Teatro de la Opera de Viena sino en la Sala Dorada de la Vienen Musikverein de Viena (club de música). Nosotros asistimos a un concierto de cámara en Salzburgo donde se interpretó música de Beethoven, Mozarat y Grieg en una preciosa sala de conciertos del Ayuntamiento de esa ciudad. No tuvimos posibilidad de otra cosa. Saludos.
ResponderEliminarMe encanta la zarzuela, pero oir por la calle música de Mozart debe de de ser apasionante. Un abrazo Lola
ResponderEliminarDesde chiquita oí zarzuela y comentar sobre ella. El escuchar música en el lugar en donde fue creada debe ser muy bonito.
ResponderEliminarsaludos
Felipe, agarrarse a tu mano y dejarse guiar siempre es una delicia y esta vez lo has hecho acompañándolo de música para el deleite de los sentidos. Un abrazo
ResponderEliminarunir música con recuerdos es algo que hay que agradecer, todos vamos de la mano por sitios señalados por acordes. Beso.
ResponderEliminarEres afortunado de poder disfrutar de esa música y en el lugar apropiado.
ResponderEliminarGracias por mostrar esos lugares tan bonitos.
Besos
Cuando estuve en Viena no tuvimos tiempo de ir a la ópera, pero sí pudimos comprobar la estrecha relación que tiene Austria con la música. No en vano fue cuna de grandes compositores.
ResponderEliminarAbrazo!
Nunca estuve por esos sitios tan artísticos: y a estas alturas de mi estado,he de conformarme con las informaciones que voy recibiendo por e.mails, reportajes televisivos, y por lo que narras(con mucho acierto)en tu blog.
ResponderEliminarSaludos
Que envidia Felipe, esas vivencias musicales sí que son un placer para los sentidos y un enriquecimiento cultural.
ResponderEliminarUn abrazo.
Felipe, llegar a tu blog, es una delicia, porque siempre has posteado algo casi mágico, como debió ser tu visita a Viena, y escuchar en la "Cuna de la música" un concierto...
ResponderEliminarLas fotografías son maravillosas.
Mi felicitación y un abrazo.