Hacemos una breve parada en San Esteban de Gormaz con el fin de hacer una descanso y tomar un tentempié. Un bocadillo de jamón con tomate nos deja reconfortados hasta la hora de la comida. Reemprendemos el viaje´En esta ocasión, dejamos de lado Ayllón y continuamos por la circunvalación. Los pueblos se van desgranando a nuestro paso como cuentas de un rosario. El paisaje se torna de cuando en cuando algo más anodino conforme nos dirigimos a Segovia. En la lejanía la sierra de Gredos
La imponente mole gótica de la catedral segoviana surge de improviso en lontananza. Detrás de ella intuimos las oscuras torres del alcázar. Nos olvidamos de ellas y continuamos por la N-110 hacia Avila. Para cuando nos queremos dar cuenta ya la hemos dejado atrás.
Fuente de Piedrahita |
Nos encaminamos a una calle lateral y por un arco en la muralla salimos a la calle denominada Fuera de la Villa, nombre acorde con su situación. Las paredes de la muralla sirven de muros para las casas que incluso tienen sus terrazas sobre ella. Dejamos para otra ocasión visitar la iglesia y el palacio barroco de los duques de Alba; subimos al coche y reanudamos la marcha.
Puente del Congosto |
En lugar de continuar en dirección Plasencia, giramos a la derecha y tomamos la carretera que nos conduce a Béjar. Se trata de una vía bien asfaltada, bastante llana, con pocas curvas y escasa circulación que transita entre robles y pinares.
El Castillo de los Dávila |
Al salir de una curva e iniciar un descenso nos topamos con la visión a nuestra derecha de un puente medieval que salva el río Tormes y un castillo junto a él, indudablemente construido para su defensa. El pueblo se llama Puente del Congosto. Preguntamos a un lugareño la forma de acceder al puente y siguiendo sus indicaciones descendemos por la calle Mayor hasta una explanada donde tenemos a nuestra izquierda el castillo y a la derecha el puente.
El lecho del río Tormes |
El río discurre por un lugar muy agreste, rocoso, formando remansos y precipitaciones de una sobria belleza. El imponente castillo asentado sobre rocas berroqueñas domina todo el contorno. En lo alto del pueblo se dibuja la silueta de la torre de una magnífica iglesia gótica. Hago unas cuantas instantáneas y volvemos a nuestro vehículo para continuar nuestra ruta.
El actual puente sobre el Tormes |
Vemos la cinta refulgente de la autovía a cierta altura. En lugar de tomarla en Béjar lo hacemos en el cercano pueblo de Fresnedoso. Ciento cincuenta kilómetros nos separan de Cáceres. Son las seis de la tarde cuando llegamos, miro el cuentakilómetros y llego a la conclusión de que este es el recorrido más corto de los que hasta ahora he realizado desde Tudela, exactamente 587 kilómetros.
Felipe, lo tuyo es la geografía, ya sea navarra como castellana o extremeña. Tienen tus paseos un regusto tal que invitan a seguirte, a imitarte. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarUn bonito viaje.
ResponderEliminarQué lugares más extraordinarios tenemos en la extensa piel de toro...
Lástima que la comida no acompañara, pero ya se sabe, no siempre se encuentra el lugar adecuado.
Tus fotos: preciosas.
Un beso grande
Magnífico recorrido espléndidamente narrado y ejecutado, solo hay un pero, aquí a todo le ponemos un pero, por ello en el día de la cruz ponemos en todas las cruces un pero (manzana) atravesada con unas tijeras, ese pero es la comida, un viaje de este tipo con un almuerzo deficiente es menos viaje y menos bello, la próxima vez a informarse mejor que una buena comida es parte importante del viaje.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me asombran los lugares que tenemos, desconocidos y cerca y que gracias a tus comentarios y fotos vivimos casi, casi, como si te hubiéramos acompañado una vez más. Beso
ResponderEliminarMejor para conducir no ir con la barriga llena, así que no te importe lo de la comida. Ya te resarcirás. Saludos
ResponderEliminarExcelente guia de viaje.
ResponderEliminarSaludos
Felipe, es que no paras. Haces bien. Un abrazo.
ResponderEliminarGran viaje!! Esa zona es preciosa. Abrazo!
ResponderEliminarAh!!! es que ibas de paso me extrañaba que no parases.
ResponderEliminarNos has descrito el vije de esa forma tan extraordinaria que tu acostumbras y ha sido un placer volver a viajar contigo.
Un abrazo y a dsifrutar de la famila que para eso has ido a Cáceres.
Te sigo como guia de viajes porque me gusta como relatas tus visitas y hasta la gastronomia.
ResponderEliminarun fuerte saludo y gracias por visistarme.
fus
Viajo con vosotros y me la paso muy bien. ¡Que bonito todo! Lola
ResponderEliminarPor fin me siento con ánimos de alcanzarte en tus viajes para descubrir nuevos lugares. Gracias.
ResponderEliminarBellísimo reportaje, me toca el alma, más que nada por ser natural de esas tierras
ResponderEliminarla semana que viene voy para allá
un cordial saludo!
RAUL
Eres el topillo que nos va descubriendo lo que a los demás nos pasa desapercibido. Un abrazo
ResponderEliminarMagnífico tu reportaje, más allá de Soria, "Castillo y puente en el camino". Eres
ResponderEliminarun viajero incansable y además un narrador y fotógrafo admirable. Se viven tus paisajes y el alma se llena de belleza viendo tus siempre precisas fotos. Un abrazo.
Ante todo Felipe, muchas felicidades por haber sido recomendado por el escritor Julio Diaz Escamilla en la cartelera semanal de su blog.Justo reconocimiento a tu blog, y a tus magnificas cronicas de viaje que tan maravillosamente narras y describes, con tanta perfección que hace que te sigamos en cada paso, disfrutando gustosamente del viaje como este a Soria y de tus magnificas fotografias.
ResponderEliminarMis sinceras feicitaciones y un fuerte y calido abrazo lleno de cariño y admiración.
Hola!!! Bueno.... y esta tarde nos veremos!!! jejejejje!!!! Estoy contenta!!!!
ResponderEliminarSabes???? Cuando se viaja sin prisa es un placer ponerte al volante!!! y si además te has evitado kilómetros... eso ue te ahorras en dinero y lo más importante.... en riesgo!!!!
Hasta luego...!!!! BESITOS Y SALUDITOS QUE LUEGO OS DARÉ Y YA NO SERÁN VIRTUALES!!!!!
Mi viaje comenzo en la cartelra A viva Voz y llego aqui, realizo un bello recorrido, lugares mis distantes somo hermosos, que en tus palabras despiertan mis deseos de ir. Tal vez, algun dia. Un abrazo
ResponderEliminar