Estamos inmersos en la crisis. Los noticiarios nos ahogan todos los días con los mismos temas económicos: desempleo, congelación de pensiones, recortes presupuestarios, disminución de los gastos sociales, la deuda subiendo, el euro bajando, la bolsa en caída libre, rescate de países como si de mineros chilenos se tratase, bancos a la deriva a los que se ha puesto una vía de “pasta” cual si fuera insulina, los mercados cebados en nuestra yugular.
Pero, hete aquí, que llega diciembre, el puente de la constitución, y la crisis parece que hace mutis por el foro. Esta mañana desplazándome en mi coche escuchaba el programa Herrera en la Onda y, según he colegido, el tema era el lugar de destino durante este viaducto constitucional.
Había para todos los gustos. Una señora marchaba a Cracovia para algo de un mercadillo. Otra quería visitar a su hijo que reside en Qatar. Una pareja no se fiaba del tiempo en el norte y se dirigía hacia el sur, aunque pensaban mojarse. Alguien ha cantado las excelencias de Huelva donde iban a permanecer. Una familia ha manifestado marchar a Buenos Aires aprovechando el haber conseguido a buen precio los billetes de avión. Mientras he estado escuchando el programa de Carlos Herrera nadie ha confesado quedarse en casa.
Crucero por los ríos rusos |
A más INRI las estaciones de esquí a tope, sin plazas. Ha nevado y hay que aprovechar no vaya a ser que la nieve se agoste si le da por hacer calor. Era lunes, día de trabajo, pero el Camp nou se encontraba a rebosar en el “clásico” F.C. Barcelona-Real Madrid. ¡Joder con la crisis!
Se ve que aquí los apuros son para los desempleados a los que les van a escamotear los 426 euros de marras. Los demás nos privamos de pocas cosas. Eso sí, todos hablamos de lo mal que está todo, lo que cuesta llegar a final de mes, la hipoteca que aprieta, aunque por lo visto no ahoga, la falta de alegría de todos los sectores, excepto el del ocio, claro.
¡Qué sosiego para las conciencias saber que cuanto más gastamos y consumimos nosotros, más estamos contribuyendo al confort de los desheredados de la fortuna puesto que estamos incentivando el consumo y haciendo que se mantengan los puestos de trabajo! ¿Como nos van a mirar de forma aviesa los que carecen de lo más imprescindible, entretanto nosotros despilfarramos alegremente, si estamos colaborando a su bienestar?
¿Veis que fácil es tranquilizar los pocos escrúpulos que nos restan? Nada, nada, a cooperar con los desamparados puliendo lo que nos queda y lo que nos falta. Hay que ser solidario hasta reventar.
No se si es causa de risa o de desconsuelo.
Así es, Felipe. Mientras un tercio de la población mundial come cuando le apetece, de los cuales la mitad debiera comer menos para evitar el sobrepeso, el 66% de los humanos come lo que puede, cuando puede. También entre nosotros hay mucha gente que lo están pasando muy mal, a quienes se les anuncia que van a dejar de percibir la ayuda de 400€. Me parece un disparate hacer tanta ostentación viajera en medio de tanta gente desesperada.
ResponderEliminarBueno aqui en España nunca se sabe, hay crisis para algunos y para otros no. A vivir que son dos días. El paro desde luego no es un cuento. Y muchos viven a espaldas de todo, escondiendo el ala.
ResponderEliminarYo me quedo en casita y con familia, niños y currando. Un abrazo
En algún sitio hace tiempo leí detalles sociales cobre la evolución de la clase media, es decir que los países se van desarrollando y la riqueza se distribuye horizontalmente desmarcándose de los que aún en estado de pobreza extrema tienen un pequeño grupo de ricos riquísimos y el resto se muere de hambre. Total que es evidente nuestra involución. Hay gente que se va a esquiar y de cruceros lejanos, y otros que tenían casa y trabajo están en la cola de la beneficencia. Se terminan los términos medios económicos hogareños y eso es muy malo.
ResponderEliminarNo sé Felipe , yo también me pregunto donde está la crisis. Acabo de llegar de un viaje que he tenido que esperar a estar jubilada para poder hacerlo y en el, me he encontrado con cantidad de gente joven, de esas que supuestamente son mileurista, que no solamente han hecho el viaje con treinta y pocos años si no que además no se han privado de nada ningún capricho durante el viaje.
ResponderEliminarNo entiendo nada
Totalmente de acuerdo contigo. En estas fechas en las que vamos entrando, entre el puente y las Navidades, es donde más se ven las diferencias entre unos y otros.
ResponderEliminar¿Por qué están llenos los centros comerciales? ¿Por qué hay algunos que pueden permitirse el lujazo de ver un Barça-Madrid a precios prohibitivos?
Claro que hay crisis, por supuesto, pero ¿dónde tenemos algunos (y siento icluirme en este grupo de consumistas)el umbral de las necesidades básicas?
Buen fin de semana laaargo!
Cuando se habla de este tema, no sabe uno por donde dalir.
ResponderEliminarVemos las personas que están a nuestro alrededor, los estadios repletos, en los supermercados los carros a llenos: pero a los que no vemos son a los pobres de solemnidad,que están ocultos, sin salir y sin poder comer ni siquiera las migajas que desechamos.
Saludos!!!