De mi reciente viaje a Andalucía, concretamente a la provincia de Cádiz, he traído el morral de mis recuerdos colmado de sensaciones, algunas de ellas imborrables. Entre estas se encuentra el recorrido realizado por el Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia.
El geógrafo griego Estrabón de Amasia, en el tercer tomo de su geografía dedicado a Iberia, escribió en el año 18 d.C.
“..Baelo es un puerto donde generalmente se embarca hasta Tingis (Tánger), en Mauritania. Es también un emporio que tiene fábricas de salazones…”
Esto nos da una ligera idea de lo que era esta ciudad romana en aquella época y la importancia de su industria de salazones.
La ciudad fue fundada en el siglo II a.C. en la ensenada de Bolonia, situada en la orilla norte del Estrecho de Gibraltar. Encerrada por las montañas de las sierras de la Plata y San Bartolomé, el mar era su mejor medio de comunicación y a él le debió su riqueza y reputación. La industria pesquera, especialmente del atún, fue la causante de su desarrollo. Con el cambio de Era recibe el apelativo de Claudia, promocionándose a municipio romano, disfrutando del periodo de prosperidad más importante de su historia. En el siglo III, a causa del terremoto que la asoló, inició su proceso de decadencia.
Las recientes excavaciones han puesto de manifiesto el conjunto urbano romano más completo de la Península Ibérica , con monumentos de un interés extraordinario como la basílica, el teatro, el mercado y el templo de Isis. En ninguna otra parte se muestra una visión tan acabada del urbanismo romano.
Debo reconocer que, hasta ahora, las visitas realizadas a ruinas de ciudades romanas, salvo honrosas excepciones, siempre me habían dejado bastante escéptico. No fue así con éstas. Todo el recorrido me cautivó: el foro, el mercado, la fábrica de salazones, el teatro; pero fue el poder caminar por el decumanus máximus, por su enlosado original espléndidamente conservado, lo que me produjo una gran impresión.
Abandoné el recinto gratamente sorprendido por lo que había visto y sentido. Quizá influyó en mi estado de ánimo la maravillosa tarde otoñal, casi veraniega, el espectacular paisaje que enmarca todo el conjunto integrado en el Parque Natural del Estrecho de Gibraltar.
Fascinante la armonización de las piedras, doradas por el ocaso, bañándose en el Atlántico. Entretanto, como colofón, la Duna de Bolonia, desde su privilegiado emplazamiento, me despide mostrando, desvergonzada, su impúdica alopecia.
Ni en el mejor anuario de historia podríamos encontrar más detallada información que la que nos ofreces, Felipe. Se nota tu debilidad por la historia en todo aquello que tocas, y cómo no te precipitas a lanzar lo fotografiado sin antes rebuscar y adobar las imágenes con una prolija y detallada información. ¡Genial!
ResponderEliminarSiempre me ha intrigado y emocionado ver ruinas romanas. Vuela la imaginación pensando, cómo vivian sus gentes, cómo se divertian,la política, el comercio, cuales eran sus preocupaciones. Tus acertadas fotos ayudan a la imaginación, a la intriga y a la sorpresa
ResponderEliminarSaludos!!!
He visitado Bolonia en un verano resplandeciente y comparto tu entusiasmo por estas interesantes y bien documentadas ruinas. Un hallazgo, gracias por traerlas. gloria
ResponderEliminarFelipe,
ResponderEliminarTu descripción del conjunto arqueológico Baelo Claudia está muy interesante.
Las ruinas son siempre testigos no mudos, sino que tienen mucho qué contarnos de los tiempos lejanos, y tú has interpretado a las mil maravillas el mensaje arqueológico.
Cordiales saludos
Te me has adelantado, tenía en mente también un artículo basado en las fotos de ese día; aunque conociéndome, y que tengo todavía en "borradores" el de Grazalema, ya veremos cuando este ve la luz...
ResponderEliminarA mí, al igual que a Manrique, también me llaman la atención las ruinas. ¿Cómo es posible que hayan logrado mantenerse después de tantísimo tiempo? ¿Qué quedará de nosotros dentro de 2000 años?
ResponderEliminarMe ha encantado tu descripción del lugar.
Abrazos!!
Hola amigo:
ResponderEliminarMe hizo mucha gracia "la impúdica alopecia" en el marco de un viaje encantador vía historia y fotos.
Un abrazo.
Soy Lola de boheme. Es un placer leerte oyendo esa música de Albinone que me encanta. He leido varios de tus posts y tu linea me gusta. Creo que voy a aprender mucho contigo. Un abrazo y hasta pronto. Lola
ResponderEliminarBueno, a falta de medios para viajar, con tu excelente guía he reaslizado un hermoso paseo imaginario. Muy bello post. Me encantó llegar hasta acá. Un abrazo.
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